En lo que respecta a las propiedades del cloruro de sodio hay que empezar por mencionar que es un compuesto soluble en el agua, mientras que en la mayoría de los líquidos restantes es insoluble o ligeramente soluble.
La forma del cloruro de sodio es pequeña, incolora, transparente y se asemeja a pequeños cristales cúbicos de color blanco. Es un compuesto inodoro y por su sabor se lo puede reconocer con facilidad porque se trata de sal común, es decir, es un elemento salado.
Generalmente se encuentra el cloruro de sodio en su forma cristalina o sal de mesa. De todos modos se debe anotar que existen algunas modificaciones o diferencias en la sal en relación con el nivel de sodio y cloruro. Un buen ejemplo de ello es la sal de mar, ya que es la más baja en cuanto a sodio respecta.
Por otro lado, es un compuesto iónico que está compuesto por la misma cantidad de sodio de carga positivo que los iones de cloro negativos. En caso de fundirse o disolverse en agua, los iones se van a mover con libertad, razón por la cual el cloruro de sodio es un conductor de electricidad en ese estado, llegando incluso a descomponer en sodio y cloro, consiguiendo incluso que pase un poco de corriente eléctrica.