Todos conocemos a Aristóteles de nuestras clases de filosofía: Griego, de barba, con ideas muy particulares acerca del alma, la metafísica, la política y la poética…
Puede que tu profesor de filosofía no te lo haya dicho pero este filósofo griego en una de sus obras, la poética, que escribió hace 2300 años, estableció o identificó las normas que rigen el arte de contar historias.
Arte que se mantiene hasta nuestros días.
Los superhéroes de Marvel según Aristóteles
Sí, pese a lo antiguo del trabajo de Aristóteles, la estructura que el identificó y que compone todas las historias, de cualquier tipo, es básicamente la misma. Y lo ha sido desde el inicio de los tiempos.
Por eso el drama de por ejemplo: Noé construyendo el Arca y el de Tony Stark construyendo su armadura para convertirse en Iron Man, pesé a ser diferentes en las formas son muy parecidos en estructura.
La estructura de Aristóteles
Esta estructura es conocida por todos, no hay cuento infantil que no se base en ella. Está compuesta por tres fases:
Inicio > Nudo > Desenlace
Así tenemos que Wade Wilson en sus peripecias desde la enfermedad hasta que se convierte en el héroe parlanchín Deadpool para cobrar venganza no hace sino atravesar por tres fases: Inicio, nudo y cierre.
Lo mismo Wolverine, el hombre araña y cada héroe que puedas imaginarte.
Aunque la estructura no se limita al cine de gente con súper poderes. Cualquiera de tus series favoritas tiene la misma forma de desarrollarse.
Sí, desde Lost hasta Breaking Bad.
Así que la próxima vez que estés disfrutando de las peripecias de tus personajes favoritos recuerda que ya te hablaron de sus dramas y cómo los resuelven en clases.