Perteneciente a una familia muy amada por Jesús, Marta de Betania fue una mujer que desde su rol como ama de casa se hizo conocer por la grandeza de su fe, algo que la convirtió en discípula fiel del hijo de Dios y que tras su muerte fue determinante para que pasara a ser reconocida como la Virgen Santa Marta. La iglesia católica celebra su fiesta cada 29 de Julio, fecha en la que se aprovecha para que sus devotos le rindan homenaje y recuerden que al ser la patrona de los cocineros, empleados domésticos, amas de casa, de los posaderos y hostales, todo aquel que requiera de su intercesión puede acercarse para recibir sus bendiciones.
Considerando que Marta tiene como significado «señora, jefe del hogar», todos los dones que de ella se desprenden hablan de protección, cuidados y de esos anhelados remedios para sobrellevar cada una de las dificultades diarias.
La devoción a Santa Marta
Son muchos los hechos trascendentes que hacen parte de la vida y obra de esta piadosa mujer, tenemos por ejemplo su honesta y contundente declaración de fe un precioso momento descrito en la Biblia donde Marta habla con Jesús y sin temor alguno señala: «creo que tú eres el Mesías, el hijo de Dios que debía venir al mundo». Asimismo sobresale del banquete que preparó a manera de celebración y acción de gracias por la resurrección de su hermano Lázaro, un momento en el que Marta se encargó de hacer todo lo propio para atender a Jesús y a sus acompañantes con todos los detalles y el mayor amor que emanaba su corazón.
Así pues acudir a santa marta oracion corresponde a disponer de un vehículo para encontrar consuelo ante las penas y aflicciones, de igual manera es una herramienta para llenarse de fortaleza y acceder al poder de la Cruz, algo que definitivamente será garantía para superar cualquier tipo de obstáculo por más complejo que sea.
La bella oración a Santa Marta
Su marcada presencia compasiva y la transparencia de su espíritu siempre acogedor y hospitalario logra que la oración a Santa Marta se convierta en un gran recurso para todos aquellos creyentes que se debaten entre tribulaciones, dificultades en el hogar y en general todo aquello que pueda interferir con la armonía. Puesto que ayudar a los demás siempre fue una prioridad para ella, su ejemplo de virtud es enorme y por supuesto merece de gran atención.