La piel es vulnerable a una celulitis infecciosa cuando sufrimos una herida, picadura o cortada, ya que en ella ingresan bacterias que causan este problema.
Esta afección ataca áreas como el rostro, brazos y piernas, evidenciando inflamación, dolor y enrojecimiento, aunque también se puede originar en otras zonas del cuerpo.
Bacterias más comunes de la celulitis infecciosa
Este tipo de infecciones, generalmente empieza a desarrollarse directamente en la zona de la piel donde está ubicada la lesión.
En este sentido, las células situadas bajo la capa superficial de la epidermis, se vuelven vulnerables ante microorganismos como los estreptococos y estafilococos.
Asimismo, a la ruptura pueden acceder otras bacterias que se encuentran normalmente en el tegumento, pero se vuelven perjudiciales al generarse una infección.
Conoce los síntomas más resaltantes de esta infección
Algunos de los síntomas de la celulitis infecciosa, son consecuencias de sustancias inflamatorias que generan las células como mecanismo de defensa.
Los indicios más frecuentes son hinchazón, dolor, enrojecimiento, pero también se pueden desarrollar ampollas y la acumulación del tejido graso (piel de naranja).
De igual manera, la fiebre forma parte del malestar de la celulitis infecciosa, por lo que se recomienda acudir inmediatamente a un especialista.
Consejos para prevenirla
Prevenir la celulitis infecciosa resulta sencillo si limpiamos las heridas de la piel a diario. Para ello podemos usar simplemente agua y jabón.
Además, también debemos proteger la zona afectada empleando vendajes limpios, los cuales tienen que cambiarse todos los días para evitar que la lesión quede expuesta ante cualquier posible agente infeccioso.